En una economía liberal capitalista es el consumidor quien manda. Aceptemos esta primera conclusión sin entrar en otros matices, más propios de la discusión experta sobre la compleja ciencia de la economía. En todo caso, todo empresario sabe que su producto o servicio necesita, obviamente, de los consumidores para sobrevivir en un contexto cada vez más competitivo. Y aquí viene una ola, más bien un tsunami, que algunas empresas y organizaciones, aún no las suficientes, ya ven en el horizonte inmediato. Hablamos de lo que piensan, desean y esperan los consumidores en España.
La Fundación BBVA ha publicado un amplio estudio sobre los Valores, actitudes y conducta medioambiental de los españoles, una amplia encuesta con 4.500 entrevistas telefónicas que retrata con elevada precisión la importancia que le dan los españoles a este asunto.
El primer dato que llama la atención es que el interés por los temas medioambientales se traslada a las conversaciones cotidianas con amigos y familiares. La mitad dice hacerlo con frecuencia e incluso un 12% muchas veces, frente al 40% que lo hace con menor frecuencia y un 9% que no lo hace casi nunca. Este hábito se ha duplicado en los últimos quince años: en el 2005 solo un 25% afirmaba que el medio ambiente formaba parte de sus conversaciones con alguna frecuencia.
Asimismo, la casi totalidad de los españoles cree que en los últimos 20 años han aumentado fenómenos climáticos como la temperatura media del Planeta y los cambios bruscos e impredecibles del clima. En verdad, solo es necesario salir a la calle a las 4 de la tarde para darse cuenta.
Y ahora, una vez reconocido el problema a pesar del esfuerzo de los negacionistas, ya tomamos conciencia en nuestra responsabilidad.
Según el estudio, la mayoría de los ciudadanos expresa preocupación por el impacto de la acción del ser humano en la naturaleza: existe un amplio acuerdo en atribuir el origen del cambio climático a la actividad humana (el 80%), mientras que es muy bajo el segmento de quienes creen que se trata de un proceso natural de la Tierra (8%) y el de los que creen que se debe a ambas cosas (11%).
Y un paso más: Tres de cada cuatro españoles perciben que la mejora del medio ambiente depende de una combinación de dos factores: el cambio del estilo de vida y el avance del conocimiento.
Si se toman en consideración dos de los comportamientos de cuidado medioambiental -la compra de electrodomésticos de bajo consumo y la de productos en envases reciclables- se observa que su seguimiento declarado es mayoritario en todos los segmentos, aunque aumenta claramente en las mujeres, los individuos de mayor nivel de estudios, quienes tienen una visión no materialista de la naturaleza y los de nivel alto y medio de conocimiento medioambiental.
La amplísima mayoría cree que es mejor que el Gobierno imponga normas que obliguen a los individuos (88%) y a las empresas (95%) a tomar medidas para proteger el medio ambiente antes que dejar el asunto en manos de cada persona o empresa particular.
Interesante estudio que nos permite plantear algunas reflexiones. Desde Foundation Human Talent, estamos empeñados en ayudar a empresas y administraciones a tomar medidas que nos acerquen al cumplimiento de los Objetivos de Desarrollo Sostenible ODS de la Agenda 2030.